La marihuana es la droga ilegal más utilizada en el mundo y se ha asociado a una serie de problemas de salud, incluyendo el deterioro cognitivo. Uno de los efectos nocivos de la marihuana es la pérdida de neuronas, que puede tener consecuencias permanentes.
La marihuana afecta el funcionamiento de la memoria, la capacidad de aprendizaje y la coordinación. La marihuana también puede afectar el funcionamiento de los pulmones.
¿Qué le pasa a las neuronas cuando fumas porros?
Las neuronas son células en el cerebro y el sistema nervioso que se encargan de enviar y recibir señales. El THC, el principal componente del cannabis, se une a los receptores de cannabinoides en la superficie de las neuronas y activa o inhibe la transmisión de señales. En el cerebro, el THC afecta a áreas importantes que controlan la memoria, el movimiento, la percepción del tiempo y la cognición. El THC también puede aumentar la actividad en algunas áreas del cerebro y disminuirla en otras. Estos cambios en la actividad cerebral pueden causar los efectos del cannabis.
¿Qué es peor para tu cerebro: fumar marihuana o beber alcohol?
El alcohol y la marihuana son dañinos para el cerebro. El alcohol puede causar daño cerebral permanente, mientras que la marihuana puede afectar el desarrollo cerebral.
¿Cuántas neuronas se pierden en un día? | Guía completa
La cantidad de neuronas que se pierden en un día depende de varios factores, incluyendo la edad, el estilo de vida y la salud general. En general, se estima que se pierden aproximadamente 100.000 neuronas por día. Esto puede parecer una cantidad alarmante, pero es importante tener en cuenta que el cerebro tiene un gran número de neuronas y que estas se regeneran constantemente.
La marihuana es dañina para el cerebro. Aunque se pierden neuronas al fumar un porro, no se sabe exactamente cuántas.
Según un estudio realizado en 2012, fumar un porro diario durante cinco años resulta en una pérdida de aproximadamente el 11% de las neuronas en el área del cerebro responsable de la memoria y el aprendizaje.
